viernes, 15 de mayo de 2009


El ánimo de trabajo alemán y el buen clima están haciendo que despierten temprano a comenzar sus proyectos veraniegos. Parte muy importante de esta cultura es el tener una que otra cosa que hacer en los hogareños domingos de este lugar y poco a poco me acostumbro a madrugar con los sonidos. También me ha sacado una que otra sonrisa extra el que el calor se les haga insoportable en este momento, cuando yo todavía necesito mi pulli. El sol y mi bicicleta alientan la relación Pablo-Naturaleza y empiezo a pedalear un poco más entre los bosques para alimentar aquella mi necesitadísima practica llamada deporte. Aunque tengo que admitir que no estoy en mis mejores días el sol sigue radiando la alegría que suele acompañar mis ánimos y la redacción va disminuyendo un poco a medida que el clima mejora, cosa que nunca pensé que pasaría. Mas no he olvidado el gusto que le he tomado a redactar la cotidianidad de mis días.
Ya llega la familia que ansiosa quiere festejar las fiestas de mi hermana y al mismo tiempo yo me voy a festejar las fiestas de mi intercambio.
En fin, son las once de la mañana y mis tres horas conscientes no me han dado mucho que decir...
¡Han llegado tres paquetes! ¿será alguno para mí?

No hay comentarios:

Publicar un comentario

 
Creative Commons License
A mis tres lectores by Juan Pablo Navarro is licensed under a Creative Commons Atribución 2.5 México License.